En este artículo, te explicaremos como dibujar desde la observación, con ejemplos claros y precisos, de cómo lograrlo. Será todo un desafío, ya que, por ejemplo, te pediremos que hagas tus dibujos patas para arriba, pero tranquilo, es solo parte este ejercicio. Prueba esto para eliminar errores al dibujar.
Un ejercicio infalible para aprender a dibujar lo que vemos, dibujo de observación.
Para acercarnos al método del dibujo de observación, que, nos permite dibujar lo que vemos, tenemos una propuesta que hacerte.
Olvida lo que sabes hacer en la hoja cuando hay un modelo en frente. ¿Qué quiere decir esto? Puede sonar una paradoja, pero, en el dibujo de observación, si bien, se precisa del entendimiento de lo que estamos dibujando, debemos olvidar el modo en el que lo hacemos cuando dibujamos, y crear libremente.
Al momento de encarar un retrato, tenemos a una persona enfrente, mientras comenzamos a dibujar el rostro, nos vamos a ir encontrando en la tarea de resolver cada una de las facciones.
Puede ser, que, nosotros tengamos un modo particular de dibujarlas, que solemos utilizar aun, cuando no tenemos modelo.
Ejemplo claro, los ojos.
En el caso de los ojos, es probable, que, mediante mucha práctica, sin darnos cuenta, ya tengamos un modo particular de ir construyendo su dibujo, ya que, en la mayoría de los casos, lo habremos intentado muchas veces, sin referencia.
Esto conformaría un estilo casi automático, en el que, con ciertos trazos, rápidamente, le podemos dar forma.
Este modo, no nos serviría en el caso de dibujar desde la observación, con la intención de capturar toda la naturaleza de lo que tenemos enfrente.
Seguramente, entraríamos a nuestro trabajo con la mirada puesta en la hoja, elaborando los ojos a nuestra manera, y adaptando por medio de los trazos, algunos rasgos de quien tenemos enfrente. Es válido, pero, no nos serviría tanto a la hora de dibujar lo que vemos, con la mayor proximidad a su naturaleza.
Esta característica, suele ser, la primera inquietud que surge en quien aún, no experimento dibujar del natural, y, está más acostumbrado a utilizar su imaginación en mayor proporción, cuando dibuja.
Se trata de ir aprendiendo nuevos recursos, que sean útiles para acercarnos mejor a lo que vemos, y pasarlo al papel.
Abandona los viejos esquemas, deja espacio para lo nuevo
Hay que dejar de lado esos viejos esquemas, esas maneras de resolver el dibujo, que la mayoría experimentamos desde que somos niños.
Para este nuevo método, será momento de proponernos, ver, pensar, y dibujar, tan solo a través de las formas, las líneas y los grises, que son nuestros elementos visuales, y lo más puro del dibujo, en estos casos.
Toda esta teoría sucede, cuando nos adentramos a dibujar lo que tenemos enfrente, y estamos trabajando el “dibujo del natural”
Para profundizar, en esto que llamamos dibujo de observación, y poder entender que sería desnaturalizar lo que vemos, a la hora de dibujar, tenemos un ejercicio muy práctico. Va a desafiarnos para entender esto que sucede, y nos remontará, a la experiencia de lo que estamos buscando, a la hora de olvidar lo aprendido, en el dibujo de observación.
¡Dibujando patas arriba!
Tomaremos una imagen, que contenga figuras que puedas reconocer fácilmente, como pueden ser los retratos o paisajes. Es cuestión de encontrar una fotografía de referencia, que nos motive, algo simple para empezar.
Todo el ejercicio, lo haremos en base a esta imagen, si bien, se trata de una fotografía, y no estamos trabajando desde la realidad, debe hacerse en este modo de dibujar.
Este trabajo, nos va a revelar la experiencia de lo que estamos proponiendo.
Cuando tenemos nuestra imagen seleccionada, debemos invertir su sentido en 180º, de manera que, nuestro ejemplo, estará patas para arriba, y, en efecto, ya no veremos la imagen de la misma manera.
Será incomodo, porque no vamos a estar reconociendo fácilmente los elementos, y ese precisamente, es el sentido del ejercicio.
La hora de la verdad llegó ¡No voltees la hoja hasta el final!
Es el momento de tomar una hoja, y dibujar nuestra imagen tal como la vemos, patas para arriba, ¡Sin voltearla jamás! ¡NI por ninguna razón! Así, hasta el final.
Este, es un desafío incómodo, lo admitimos, pero podemos dar garantía de que es divertido.
Mientras lo hagamos, todo será un esfuerzo de relacionar líneas, formas y direcciones, nuestros principales recursos como dibujantes.
A medida que vayamos avanzando, vamos a ver, que, esto, es muy útil para aprender lo que implica dibujar desde la observación.
Una vez finalizado, será momento de voltearlo, y así, devolver tanto la imagen, como su dibujo, al sentido de lectura original, allí nos vamos a encontrar con muchas sorpresas, aciertos y desaciertos.
Diversión + Aprendizaje = ¡Resultados satisfactorios!
Tómalo con diversión, como un ejercicio que nos desafía, y, que nos hará aprender muchísimo a observar.
Una nueva manera de ver las cosas no puede fallar. Como todo ejercicio de dibujo, realizarlo una sola vez sería bastante poco, así que proponemos realizarlo unas varias veces, cuantas más, mejor, siempre.
Conclusión
Como vimos durante el artículo, te enseñamos a dibujar desde la observación, con pasos claros y detallados, la diversión mientras haces tu trabajo, también, juega un papel importante en el proceso de aprendizaje.
El ejercicio que te mostramos, para aprender a dibujar lo que vemos (dibujo de observación) no falla, te recomiendo, que vuelvas a leerlo, realmente te será de gran ayuda.
Nuestra recomendación: Prueba esto para eliminar errores al dibujar
Repito ¡Es infalible!
